domingo, 19 de enero de 2014

Nosotros dos, vos y yo... NUNCA MÁS.

Nunca me arrepentí tanto de algo como de compartir mis vacaciones con vos, Agustín. Me las arruinaste, en resumen. Hubo muchos chicos que no me trataron como me merezco, pero vos sinceramente te fuiste de tema. Nunca nadie me mintió tanto como lo hiciste vos, e imaginate cuanto me lastimaste que no me quedan fuerzas ni para quererte. Estos últimos días, estaba tan preocupada en las consecuencias de lo que pasó, que no me enfoqué en los hechos. Me hiciste cosas que yo no quería que me hagas, no te importó nada de lo que dije, me hiciste sentir bien solo para tener alguien con quien estar en la costa, y no te importó ni un poquito lo que yo siento, o más bien dicho lo que sentía por vos. Te dije cuán enamorada estaba de vos, te dije cosas que no le dije ni a mi ex novio y usaste todo eso en mi contra, para saber cómo manipularme y hacer conmigo lo que se te daba la gana. Conmigo te divertías y ya, cuando amanecía te hacías el que no pasó nada y te ponías en el papel de hermano enfrente del resto de las personas. “¿Por qué no me llevás de la mano acá que no nos conoce nadie y no saben que somos como hermanos?” fue la pregunta que te hice mil veces y nunca contestaste. ¿Es que te avergonzás de mí? ¿Me tenés para garchar y nada más? Quisiera volver el tiempo atrás, quisiera nunca haber dejado a quien ahora es mi ex novio, y quisiera nunca haberte visto como algo más que un hermanastro inmaduro. Como me gustaría no haberme enamorado de vos, o al menos haberte dejado atrás, en el 2013. Siento que me estoy ahogando y que no puedo salir a la superficie. Siento que no importa lo que haga, no importa cuánto me esfuerce, no puedo sacarte de mi cabeza. Aunque me rodee de chicos, aunque busque la compañía permanente de mis amigos, aunque intente olvidarme de vos seguís ahí, en mis pensamientos, sin dejarme vivir mi vida tranquila. Algún día no muy lejano voy a superarte, porque olvidarte no puedo. Y lo juro por mi vida, que cuando ese día llegue vas a buscarme y te voy a decir que no, y esta vez mi NO va a valer, voy a hacerlo valer. Voy a hacerme valer, porque me merezco algo muchísimo mejor que vos, basura de persona. Juro nunca más dejarme basurear como me dejé con vos.